Efraín Huerta y Diego Rivera: el reencuentro de dos comunistas mexicanos gracias al hallazgo de una tarea colegial
En el corazón de una mudanza, entre libros y memorias, emerge una pieza histórica: una monografía de 1931 del poeta Efraín Huerta sobre los murales de Diego Rivera. Este descubrimiento no solo ilumina la obra de ambos artistas, sino que revela sus profundas convicciones y la influencia mutua en su arte y pensamiento político.
El hallazgo de un tesoro literario y artístico
La historia de este fascinante descubrimiento comienza de manera bastante inesperada. Verónica Loera y Chávez, mientras organizaba su biblioteca tras una mudanza, encontró un cuaderno entre las páginas de una primera edición del poemario «Absoluto amor» de Efraín Huerta. Lo que inicialmente parecía un hallazgo menor, pronto se reveló como la monografía más antigua conocida del poeta, un trabajo escolar sobre los murales de Diego Rivera que Huerta preparó siendo apenas un estudiante. Este documento no solo proporciona una ventana a los pensamientos tempranos de Huerta sino que también destaca su temprana admiración por Rivera, marcando el inicio de una relación intelectual que evolucionaría a lo largo de los años.
Contexto histórico y académico en la vida de Efraín Huerta
Tras ser rechazado por la Academia de San Carlos, Huerta, desilusionado pero no vencido, regresa a Ciudad de México con la intención de continuar su educación en la Escuela Nacional Preparatoria de San Ildefonso. Es en este ambiente académico vibrante donde Huerta se sumerge en el mundo del arte y la literatura, influyendo profundamente en su desarrollo como poeta y pensador. La Escuela de San Ildefonso, no solo era un espacio de aprendizaje, sino también un centro de efervescencia cultural y política que dejó una marca indeleble en Huerta.
La obra temprana de Huerta sobre Diego Rivera
El trabajo encontrado, «Las tendencias sociales de Diego Rivera», escrito por Huerta y ilustrado por Rafael Solana, muestra un análisis crítico pero perceptivo de los murales de Rivera, centrándose en su contenido social y político. A pesar de su juventud, Huerta demostró una aguda comprensión de la dimensión política del arte de Rivera, critica la representación que Rivera hace del clero, pero con el tiempo, su visión crítica se transformaría en una profunda admiración, reflejando la evolución ideológica de Huerta.
La presentación del manuscrito y su relevancia cultural
La presentación del manuscrito restaurado se realizó en la misma Escuela Nacional Preparatoria de San Ildefonso, celebrando el 110 aniversario del nacimiento de Huerta. Este evento no solo fue una celebración de su legado literario, sino también un momento de reflexión sobre la influencia permanente de Rivera y Huerta en el arte y la cultura mexicanos. La edición cuidadosamente preparada del trabajo de Huerta permite a un nuevo público apreciar su temprano análisis de los murales de Rivera y su contexto histórico.
Impacto y legado
El texto de Huerta sobre Rivera destaca como una obra precoz de crítica artística y reflexión política. A través de este manuscrito, podemos observar el inicio del pensamiento político y estético de Huerta, que eventualmente lo consolidaría como uno de los grandes poetas mexicanos. Su crítica inicial y la posterior admiración por los murales de Rivera ilustran la complejidad de sus propias posiciones políticas y artísticas. Este hallazgo no solo enriquece la historia del arte mexicano sino que también proporciona una comprensión más profunda de las interacciones e influencias cruzadas entre dos figuras cruciales en la cultura mexicana del siglo XX.